La
niña del columpio (Nunca perdí la inocencia)
Seis
décadas más tarde…
Ya pasado el tiempo se marcha la niña. Muy lejos del pueblo ya vive la niña.
Que suspira y llora siempre que se acuerda, de
la vieja soga colgada en la
encina. Del joven vecino… también su vecina. Años de silencio sin cuerda ni encina.
Sin dulces recuerdos, ni amargas desdichas, ni trenzas ni velo, no llevo rebeca
ni vestido nuevo, no soy una niña ni
pretendo serlos, ya nos vienen otros pisando el terreno.
Deja que me mire un poco al espejo,
por si las arrugas son solo el reflejo de esta luz tan pobre…
Me comprare otra que no tenga arrugas ni cabellos blancos,
guardaré mis manos dentro del bolsillo,
les pondré más crema y nuevos anillos.
Ya pasan los años, años de silencio,
ya
llega la hora de volver al pueblo.
¡Lo encuentro más chico! ¿Oh es que no me acuerdo?
La calle empedrada, los vecinos nuevos, hacen que me olvide, de todos aquellos.
¿Dónde están los míos? ¿Qué ha sido de ellos?,
pregunto a la gente y escucho silencio. Donde están los hijos, donde están
los nietos…donde están los años que pase con ellos. ¿Dónde mi vecino o fue solo
un sueño?
Nadie me conoce, ríen en silencio…, parece que el tiempo no
pasó por ellos.
Husmean, susurran cuentos y más
cuentos,
que si la vecina, que quienes han vuelto.
Las tristes campanas ya tocan a muertos
del viejo columpio yo les estoy viendo.
¿Quién es aquel hombre? Se acerca en
silencio,
le tiemblan las piernas blancos sus cabellos.
¡Deja que te ayude no caigas al suelo!
¿Por qué llegas tarde? Sabes que te
espero,
no tengas reparo, no me tengas miedo,
en el otro mundo junto estaremos.
Hortensia Alcalá García
No hay comentarios:
Publicar un comentario