Quebranto
El alcaraván
que canta en el lejano barranco,
llamando a su al
caravana que lejos lo está esperando.
Lleva con él
una pena - una pena y un quebranto,
por cantar quebró su voz… ya no puede con su canto.
Por cantar
quebró su voz, ya no puede – con- su- canto.
El olor
a primavera… a los dos vuelve a juntarlos
-allá por los
riachuelos, cercanos a los barrancos…
El furtivo
cazador que sale a cazar armado
a la
compañera alcanza, sin risas
se queda el campo.
A la compañera alcanza…
sin risas… se quedó el campo.
El alcaraván no
ríe… sigue su ruta cantando, el dolor
del sufrimiento
- el dolor de pena y llanto…
Lejos se queda
el arroyo, lejos se quedan los campos,
el
alcaraván se aleja, tan solo con su quebranto.
El alcaraván se
aleja… tan solo con su quebranto.
Autora:
Hortensi Alcalá García
Cheña
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